A estas alturas de la vida, no quiero decir que me considere mayor pero........ el derroche de la juventud hace ya tiempo que paso, aún siento ese empuje de vitalidad que unos años atras me llevo a vivir mi vida como si fuese la unica de que dispongo, unas veces con mejor fortuna y otras, las que menos, con peor resultado.
El devenir de los años me ha dado mesura, equilibrio, tranquilidad e incluso a veces paciencia y la sabiduria necesaria para entender que un monton de virtudes esperan ser descubiertas en detrimento de mis defectos, que todavia se me antojan demasiados.
Por todo eso y un monton de cosas mas que la vida tiene de buena, intentare seguir manteniendo mi espiritu intacto, joven y libre, con la unica finalidad de preservar esa vitalidad que me permita " vivir para ver y ver para creer "
Bienvenidos

jueves, 27 de septiembre de 2012

PIRINEO ESTRESS, MOMENTOS.

   Cuando me dispongo a actualizar el Blog y tengo que decidir que fotografías poner siempre se me presenta una ardua tarea. He de escoger de entre las que tengo aquellas que me transmitan el momento en que fueron tomadas, que mas se adecuen a lo que escribo, que mejor queden visualmente, etc,  de esta preseleccion quedaran un máximo de seis a ocho, que son la mitad o menos. Que pasa con el resto? pues las desestimo sin mas, quedan archivadas en la carpeta correspondiente. Pero esta vez había muchas fotos con momento y no quería que se quedasen en el tintero de la memoria digital. Puede que no sean las mejores fotos de esta salida pero tienen el momento en el que yo quería estar.

        La subida a los ibones de Coronas tiene un fuerte desnivel, aquí fue donde empezó realmente esta salida, partimos del valle y entramos en la alta montaña con todo lo que está representa para mi.

         El cobijo que conseguimos bajo esta gran piedra fue lo suficiente para pasar la noche sin comodidad, fue sin duda un vivac doloroso para el cuerpo, no así para la mente.

        Cuando el amanecer no es quien te sorprende a ti y eres tu mismo el que lo espera a el, es el comienzo de un fructífero y maravilloso día en la montaña.

           Después de sopesar los riesgos avanzamos con calma y sin miedos, seguros de lo que estábamos haciendo, sin permitir que el peso histórico del paso de Mahoma nos oprimiese accedimos a la cumbre.

        Los glaciares y sus grietas son reflejo de lo vivido, aun recuerdo claramente mi primer glaciar y como al pisarlo sentí que estaba vivo.

        Hace veinticinco años me agarraba a estas mismas cadenas en compañía de mi padre, en mi mente persiste el modo en que aprendimos a sentir y a respetar la montaña.

       Conocerse bien a uno mismo es a veces la clave, llegar a la escupidera es duro pero si la mente no te traiciona sera un paseo del que disfrutar.

         La cumbre siempre es un lugar mágico y contradictorio, el descubrimiento, la paz por lo conseguido, algo que termina y algo que empieza.

        Estos fueron mis pequeños momentos.

1 comentario:

  1. estoi seguro que dentro de un tiempo,nosotros también echemos la vista atrás y recordemos todos aquellos buenos momentos que hemos compartido juntos.en lo personal,solo me cabe darte las gracias,por tus enseñanzas,por estar siempre dispuesto a la acción,....pero sobre todo por esa pasión y ese respeto que sientes por la montaña.no cambies nunca.un abrazo amigo ser!!!

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